El número de personas con sobrepeso y obesidad ha aumentado de forma significativa en los últimos años, tanto entre jóvenes como entre adultos, convirtiéndose, de esta forma, en uno de los mayores desafíos para la atención médica del siglo XXI. Descubre cómo reconocer si tienes un peso corporal excesivo y cuáles pueden ser las consecuencias, así cómo cuál es la diferencia entre la obesidad y el sobrepeso.
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Todo lo que debes saber sobre el sobrepeso y la obesidad
Desde 1975, la obesidad se ha triplicado en todo el mundo. En 2016, más de 1900 millones de adultos de 18 o más años tenían sobrepeso, de los cuales, más de 650 millones eran obesos. La mayoría de la población mundial vive en países donde el sobrepeso y la obesidad se cobran más vidas de personas que la insuficiencia ponderal. Estos son algunos de los datos proporcionados por la Organización Mundial de la Salud sobre la obesidad y el sobrepeso en nuestra sociedad.
¿Cuáles es la diferencia entre la obesidad y el sobrepeso?
La obesidad y el sobrepeso se utilizan a menudo como sinónimos. Sin embargo, desde el punto de vista médico, se refieren a enfermedades ligeramente diferentes. Ambos se definen como una cantidad excesiva de tejido adiposo que se ha acumulado en el cuerpo, lo que muchas veces contribuye al deterioro de la salud o dificulta la vida diaria de las personas provocando fatiga al andar o dolor de rodillas. La diferencia entre tener sobrepeso y ser obeso está determinada por la cantidad de exceso de grasa corporal que se ha almacenado. Este nivel se determina en función del IMC o índice de masa corporal. ¿Quieres saber cuáles tu IMC? Sigue leyendo.
¿Cómo se calcula el IMC?
Se trata de una operación muy fácil de calcular. Se realiza dividiendo los kilogramos de peso por el cuadrado de la estatura en metros (IMC = peso [kg] / estatura [m2]). ¿Qué nos indica el resultado de este cálculo?
Si está por debajo de 25, estamos dentro del peso normal.
Si se sitúa entre 25 y 30, indica sobrepeso.
Por encima de 30, se trata de obesidad.
Si supera los 40, hablamos de obesidad mórbida o extrema.
Las causas del sobrepeso y la obesidad
Con la edad, el porcentaje de grasa corporal en el cuerpo humano aumenta mientras que la masa corporal magra disminuye. Este proceso se lleva a cabo mediante un aumento del volumen de las células grasas (hipertrofia) o un aumento del número de células grasas (hiperplasia). Ambos procesos pueden ocurrir simultáneamente, siendo variable el contenido de grasa celular y el aumento en el número de células grasas es irreversible y puede aumentar indefinidamente. En los adultos predomina el aumento del tamaño de las células grasas en relación con su número.
Prevención del sobrepeso y la obesidad
La obesidad contribuye al desarrollo de diabetes, cambios degenerativos en las articulaciones y enfermedades cardiovasculares, entre otras, por eso es tan importante prevenir el sobrepeso y la obesidad.
Si tienes problemas de sobrepeso o riesgo de obesidad, empieza por cambiar tu alimentación y cuida que tus hábitos alimentarios no estén relacionados con el estado emocional. Sigue los principios de la alimentación saludable y el ejercicio. Eso sí, cuidado con el efecto rebote. Puedes evitarlo si no reduces drásticamente la cantidad de calorías consumidas. Lo correcto y sano es perder alrededor de un kilo en una semana. La pérdida de peso será más efectiva si el cambio de hábitos alimentarios va acompañado de una mayor actividad física.
El balón gástrico, la mejor opción para luchar contra la obesidad
A veces, hace falta una ayuda extra para conseguir los resultados deseados en la lucha contra la obesidad. Cuando la dieta y el ejercicio no son suficientes, la mejor solución es ponerse en manos de los especialistas, que te apoyarán en todo el proceso de pérdida de peso y no permitirán que te desanimes y abandones tus objetivos estéticos. Y aquí entra en juego el balón intragástrico FORCE®, el método más seguro para perder peso de una forma estable y continuada sin necesidad de una compleja cirugía. Gracias a este tratamiento, es posible perder entre 10 y 25 kilos (dependiendo de la duración y de cada caso particular) de forma rápida y sin riesgos.
Se trata de un balón de silicona médica que se introduce desinflado en el estómago para, una vez dentro, rellenarlo con suero fisiológico y que ocupe una porción significativa de su volumen. De esta forma, se reducen la capacidad de ingesta y el apetito, logrando así una pérdida continuada de peso. Si se acompaña de un correcto proceso de reeducación de hábitos, el balón gástrico puede suponer el punto de inflexión para un cambio radical de figura y de estilo de vida.
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CAROLINA
