Si estás buscando información sobre liposucción, sí o sí te has topado con estos dos términos: lipoláser y lipováser. Ambas se promocionan como la última, más avanzada y mejor técnica de eliminación de grasa corporal. Y es cierto que son las dos técnicas más novedosas y usadas en la actualidad, pero… ¿cuál es la mejor de las dos? Para responder lo mejor posible a esta pregunta, vamos a analizar y confrontar una con otra. No te pierdas la comparativa:
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En primer lugar, ¿qué es la lipoláser?
La liposucción láser o lipoláser, como ya nos indica su nombre, es una técnica que ataca la grasa corporal mediante luz láser de alta intensidad, disolviendo las células adiposas para permitir su extracción sin dañar el resto de tejidos. La clave de esta técnica es que no solo extrae la grasa, sino que también tensa la piel al estimular la producción de colágeno; lo cual no solo consigue el efecto estético deseado, sino que también favorece una recuperación inmediata sin hematomas ni hemorragias.
Es muy efectiva tanto en zonas más amplias (abdomen, flancos o piernas) como en pequeñas zonas rebeldes (papada, pecho, zona inferior de la tripa). Y también en áreas donde el tejido cutáneo es más sensible y tiende a descolgarse, como la cara interna de los brazos. En términos generales, esta técnica reduce los riesgos de la liposucción tradicional, ofrece mejores resultados y, además, ayuda a combatir la celulitis.
Y ahora, el turno de la lipováser: ¿en qué consiste esta técnica?
La segunda metodología en cuestión, la lipováser o váser, es un procedimiento que licúa la grasa empleando ultrasonidos, a la vez que esculpe el cuerpo y define la musculatura. Al igual que en el caso anterior, la lipováser también sirve tanto para zonas grandes como más reducidas. Asimismo, destaca por permitir moldear una gran cantidad de zonas del cuerpo como la cara, el cuello, la barbilla, el pecho, el abdomen, los brazos, la espalda superior y baja, las caderas, los glúteos, la cintura y rodillas, entre otros.
El hecho de funcionar mediante ultrasonidos permite que la lipováser actúe sobre la grasa de forma selectiva, respetando del resto de tejidos circundantes, lo que también reduce los efectos secundarios y el tiempo de recuperación posterior.
Beneficios y riesgos de la LIPOLÁSER
Beneficios:
- Mayor contracción de la piel gracias al láser.
- Permite el marcaje abdominal.
- Mejor postoperatorio con una menor inflamación.
- Cicatrices imperceptibles.
- Válida para zonas pequeñas y más sensibles.
- Combate la celulitis.
Riesgos:
- Posible riesgo de quemaduras, irregularidades y cicatrices si no se realiza adecuadamente.
- Puede ser necesaria más de una sesión en determinadas zonas.
- Eventuales complicaciones asociadas a cualquier intervención quirúrgica.
Beneficios y riesgos de la LIPOVÁSER
Beneficios:
- Gran retracción y adaptación de la piel.
- Recuperación rápida y con menores molestias.
- Eliminación selectiva de la grasa.
- Mayor supervivencia de la grasa extraída para su reutilización en lipoescultura.
Riesgos:
- Técnica más reciente y, por tanto, menos contrastada.
- Posible riesgo de hemorragias, hematomas y, en algunos casos, trombosis.
- Mayor tiempo de intervención y anestesia.
Conclusiones: ¿cuál de las dos técnicas es la más recomendable?
Teniendo en cuenta todo lo que hemos visto sobre ambas técnicas de eliminación de grasa, lo primero que podemos decir es que la competencia es ajustada. Ambos tratamientos presentan características similares en lo que a especificidad en el abordaje de la grasa, retracción de la piel y definición del músculo se refiere. Y lo mismo sucede respecto a los efectos secundarios y la recuperación postoperatoria. Entonces, ¿por cuál nos decantamos?
Para responder a esta pregunta, debemos prestar atención a las desventajas de cada una. Más allá de los riesgos habituales asociados a cualquier cirugía, en el caso de la lipováser tenemos que añadir lo novedoso de la técnica y, en consecuencia, la falta de contraste y experiencia que aún padece. Al llevar tan poco tiempo aplicándose, todavía no están estudiados a fondo sus posibles riesgos y complicaciones, habiéndose documentado algunos casos de hemorragias y trombosis. Además, los cirujanos que practican esta técnica aún son relativamente nuevos en la materia.
Por todo ello, y ante beneficios muy similares, parece evidente que la lipoláser es la decisión más acertada. La calidad de sus resultados, unida a la experiencia acumulada, la convierten en la mejor y más fiable técnica de eliminación de grasa y remodelación de la figura corporal. Si no lo tienes claro o tienes cualquier otra duda, te recordamos que en MAN Medical Institute estamos aquí para ti. No dudes en ponerte en contacto con nosotros.