La rinoplastia es una de las cirugías más populares y demandadas por los hombres tanto en España como en todo el mundo. Y su finalidad es la de mejorar el aspecto de la nariz, trabajando para ello en la remodelación de las estructuras nasales.
En muchos casos, la mejora del aspecto de la nariz se combina con la solución de otros problemas de salud, que impiden al paciente tener una mayor calidad de vida. En tal caso, hablamos de rinoseptoplastia: la cirugía de la nariz que corrige la desviación del tabique nasal para mejorar la respiración.
La rinoplastia es una cirugía que busca la perfección y el equilibrio no solo en la propia nariz, sino en las facciones del rostro: por lo que resulta fundamental conseguir una armonía en el conjunto de la cara y lograr la máxima naturalidad en los resultados.
El primer paso antes de llevar a cabo la intervención, por lo tanto, es analizar con suma precisión los rasgos y la configuración del rostro del paciente.
Una vez detectados cuáles son los problemas estéticos y funcionales de la nariz, nuestro equipo médico decidirá qué tipo de rinoplastia es la más indicada para obtener los mejores resultados; así como cuál es la vía de abordaje más adecuada para llevar a cabo la cirugía.
En general, podemos hablar de tres tipos de rinoplastia, en función de las necesidades y preferencias de cada paciente:
Rinoplastia de cartílagos y partes blandas de la nariz:
En ella, se busca elevar o afinar la punta de la nariz, estrechar o elevar la base nasal, o bien reducir las fosas nasales. Es una cirugía más sencilla que suele requerir solo anestesia local y sedación, y en la que no es necesaria el ingreso hospitalario.
Rinoplastia de cartílagos, partes blandas y partes óseas de la nariz:
Este tipo de rinoplastia puede buscar desde un estrechamiento de la nariz hasta la reducción significativa de la giba nasal (caballete). Por lo tanto, para llevarla a cabo, es necesario tanto la remodelación de la estructura cartilaginosa como la de la estructura ósea.
Rinoseptoplastia:
Cuando además del retoque estético el paciente necesita mejorar problemas funcionales, la cirugía más adecuada es la rinoseptoplastia.
La desviación del tabique nasal es un problema que afecta a muchos hombres, desmejorando su salud. Puede deberse a algún tipo de malformación o deformación de nacimiento, algún golpe o fractura o por un trastorno de crecimiento del cartílago.
Esta intervención quirúrgica modifica la desviación del tabique nasal para despejar la obstrucción de la vía aérea. De esta forma, no solo se consigue una nariz más equilibrada, sino que los pacientes puedan respirar mucho mejor.