Una liposucción es una de las soluciones más eficaces y seguras contra los cúmulos de grasa localizada que se resisten a los demás intentos de acabar con ella. Eso sí, nada es definitivo si no se cuida y se mantiene. La liposucción no escapa a este axioma: para conservar los buenos resultados de una liposucción, es necesario esforzarse por llevar a cabo una serie de cambios en nuestro estilo de vida que eviten que la grasa corporal recupere el terreno perdido. Vamos a ver en qué consisten.

Me he hecho una liposucción… ¿y ahora qué?

Has tomado la decisión a la que llevabas tiempo dando vueltas en tu cabeza. Has vencido las dudas e inseguridades y te has sometido a una liposucción para acabar con esa grasa localizada que te traía por el camino de la amargura y recuperar la figura que siempre has deseado. Ya has pasado el postoperatorio y visto los resultados finales de tu nuevo aspecto. Ahora viene el después, aprender a convivir con tu nuevo cuerpo y a darle el cuidado necesario para que se mantenga así. La liposucción es un paso, es una herramienta de ayuda, pero el verdadero cambio debe estar en ti mismo.

¿Puedo volver a engordar después de una liposucción? ¿Los resultados son definitivos?

La respuesta rápida es que sí, pero vamos a tratar de matizarla un poco. Por un lado, tenemos que recordar que la liposucción no es un tratamiento para perder peso ni adelgazar, sino para eliminar cúmulos de grasa localizada. Sí, al someterse a una liposucción y extraer determinados kilos de grasa, se produce, lógicamente, una disminución de peso. Pero este no es el objetivo de la intervención, sino acabar con reservas de tejido adiposo resistente con las que ni la dieta ni el ejercicio ni otros tratamientos de pérdida de peso han podido. 

Por otro lado, lo normal es que estos cúmulos de grasa se produzcan con el paso del tiempo. Cuando el cuerpo engorda de forma generalizada, va haciendo acopio de grasa progresivamente en distintas zonas. Algunas de ellas, como el área del abdomen y la cintura en los hombres, son más susceptibles que otras a acumular grasa resistente. Por lo tanto, sí, es perfectamente posible volver a engordar tras una liposucción, pero las reservas de grasa localizada y resistente tardarán algo más de tiempo en volver a formarse. 

¿Qué ocurre si recupero peso?

Lo primero es no alarmarse. Ten en cuenta que hay varios factores por los que se puede ganar peso, como el estrés, periodos de menor actividad o los cambios estacionales (en invierno el cuerpo genera más reservas de grasa por el frío). También lo que mencionábamos en el apartado anterior sobre cómo la grasa localizada tarda más tiempo en formarse (y, en contrapartida, también en quemarse). En última instancia, es completamente posible volver a realizar una liposucción para eliminar más grasa si fuera necesario, pero vamos a explicarte cómo puedes evitar llegar a este punto.  

¿Cómo puedo mantener los resultados de la liposucción? Cambia tus hábitos de vida

Así es. Esta es la gran y única receta. Aunque la acumulación de grasa varíe de una persona a otra y dependa en parte de factores genéticos y hormonales, el gran responsable de su exceso es el estilo de vida de cada uno. La mala alimentación, el sedentarismo y otros malos hábitos como el tabaquismo o el consumo de alcohol juegan en contra de nuestra salud y de nuestra imagen. Aplicando pequeños grandes cambios en este aspecto, puedes lograr evitar que la grasa vuelva a donde fue eliminada. Tu cuerpo y tu salud física y emocional agradecerán este esfuerzo en todos los sentidos. 

Lo que el ejercicio físico puede hacer por ti

Básicamente, contribuir positivamente en todos los aspectos de tu vida. Somos seres hechos para la actividad y el movimiento físico. El sedentarismo es un estilo de vida que va en contra de nuestra propia naturaleza y contribuye a deteriorar progresivamente nuestro organismo y varias de sus funciones vitales. Practicar ejercicio físico moderado o intenso al menos 2 o 3 veces por semana tiene un efecto beneficioso de incalculable valor para la salud. Permite quemar las calorías sobrantes, mantener a raya la grasa, fortalecer los músculos, preservar la salud cardiovascular y arterial, combatir varias enfermedades y un largo etcétera. 

Además del plano físico, el deporte también influye sobremanera en la salud mental y emocional, ya que permite liberar estrés y generar hormonas como la serotonina, la dopamina y las endorfinas, que inducen un mayor estado de felicidad y tranquilidad. Por último, también nos ayuda a descansar y dormir mejor, evitando el cansancio propio de una mala rutina de descanso y reforzando la rueda de beneficios. 

La dieta equilibrada que necesitas para mantener el tipo

Si el ejercicio es esencial para mantener los resultados de una liposucción, no lo es menos la alimentación. Tal y como ya os hemos explicado en numerosas ocasiones en este blog, una dieta equilibrada es imprescindible para un organismo sano y en forma. Las claves de una correcta alimentación pasan por dos puntos: por un lado, evitar consumir más calorías diarias de las que quemamos para que no se generen reservas innecesarias de grasa corporal; y, por otro, garantizar que el cuerpo recibe todos los nutrientes esenciales en la proporción adecuada para funcionar correctamente. 

Come de todo y variado, prestando atención a no exceder las calorías diarias. Aumenta el consumo de frutas, verduras y alimentos bajos en grasas saturadas; y reduce el de alimentos procesados, carnes rojas y azúcares. A la hora de cocinar, decántate al máximo por cocciones saludables, hervidos y alimentos a la plancha, huyendo de fritos y rebozados. Asimismo, trata de evitar el alcohol y el tabaco. Siguiendo estos sencillos consejos conseguirás cumplir con los objetivos de una alimentación saludable y mantener un cuerpo sano y la figura deseada. 

Es poco frecuente recuperar el peso después de una liposucción, pero está en tu mano mantener los buenos resultados en el largo plazo. Si tienes cualquier duda, recuerda que estamos aquí para ayudarte.