La Hora de la 1, programa matinal de actualidad de TVE, visita las instalaciones de MAN Medical Institute con motivo de un reportaje sobre los trasplantes capilares. Ante el auge exponencial de la demanda de este tipo de intervenciones, el reportero Gonzalo Menéndez se desplaza hasta la clínica de Basílica, donde ocho quirófanos operativos constituyen el centro capilar más grande de España.
Allí el periodista, quien se encuentra en pleno proceso de recuperación y crecimiento del pelo tras haberse sometido a un injerto, se cita con la doctora Rocío Olivenza, reputada especialista capilar. La doctora explica el aumento de la demanda por la necesidad de los hombres de “volver a reconocerse a ellos mismos frente al espejo” y expone las claves de la intervención. Una ”cirugía menor ambulatoria” que se lleva a cabo en tres fases: comienza con el diseño del trasplante, consensuado entre el médico y el paciente, continúa con la extracción cuidadosa de los folículos de la zona donante y finaliza con su inserción en el área receptora a través de unas incisiones que respetan la densidad y profundidad naturales del pelo.
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“No son intervenciones dolorosas, pero sí largas, ya que suelen durar en torno a 7 u 8 horas”, señala la doctora Olivenza, quien también menciona la necesidad de rasurar el pelo para realizar la intervención. En el caso de mujeres, aunque “ellas son menos usuarias de este tipo de intervenciones”, se aplican técnicas de rasurado que permiten camuflarlo con el pelo largo.
Tras las explicaciones de la doctora, el reportero pasa a recabar el testimonio de Vito Bambú, un paciente de la clínica que ya ha culminado todo el proceso de recuperación. Un año después de una intervención que recuerda como “bastante larga pero en la que no te enteras de nada”, el hombre luce un aspecto completamente distinto. “La recuperación ha sido bastante fácil, las doctoras te dicen en todo momento qué debes hacer y te realizan un seguimiento”, cuenta Vito. El primer mes es el más difícil, “estás ahí esperando que crezcan los nuevos pelos”, pero con el paso del tiempo va aumentando progresivamente. “Pasado un año, ves la nueva cantidad de pelo y no te lo crees”, asegura el paciente.
Como remate a la visita, Gonzalo, el reportero, lanza un mensaje a los espectadores: “las inseguridades hay que verbalizarlas, estamos acostumbrados a pensar que nos hacen más débiles, pero no tiene nada que ver. Hay que reconocer que todo el mundo tiene sus inseguridades y, si se puede, solucionarlas”.