La abdominoplastia es una de las cirugías de reconstrucción más demandadas, pues combina la mejora estética con los beneficios para la salud que suponen el retensado de la pared abdominal. La intervención permite eliminar el exceso de piel y grasa del abdomen y devolver la firmeza a la musculatura, pero para ello debe recurrir a un procedimiento quirúrgico más invasivo que otras técnicas. En consecuencia, el proceso de recuperación es algo más largo y delicado. A fin de despejar dudas, vamos a explicar paso a paso en qué consiste el postoperatorio de una abdominoplastia.

¿Qué es una abdominoplastia?

La cirugía plástica abdominal, conocida como abdominoplastia, es un tratamiento pensado para reforzar el vientre. Se trata de una remodelación completa del abdomen en la que se elimina el exceso de grasa y piel sobrantes, y se reafirma la pared muscular.

¿Cómo se lleva a cabo? Realizando unas pequeñas incisiones estratégicamente distribuidas en la zona baja del vientre, a través de las cuales se extrae el exceso de grasa. A continuación, se tensa la musculatura y se elimina la piel sobrante, y se sutura todo evitando dejar cicatrices visibles. El resultado que se obtiene es un vientre plano y tonificado sin apenas marcas ni flacidez.

¿Cuánto tiempo dura el postoperatorio de la abdominoplastia?

La recuperación de una abdominoplastia es un proceso que debe combinar dos aspectos: el reposo necesario para su curación y la vuelta progresiva a la actividad normal. Se debe respetar el tiempo y el descanso suficientes para que las heridas cierren adecuadamente pero, a la vez, una inactividad demasiado prolongada puede provocar otros problemas como edemas o coágulos. Por lo general, el plazo promedio para una recuperación completa y satisfactoria es de en torno a un mes, mes y medio. Vamos a analizar la cronología postoperatoria con más detalle.

El postoperatorio justo después de la intervención

En los primeros dos días tras la intervención, el paciente permanece en ingreso hospitalario para controlar cualquier posible complicación. En este tiempo se le revisarán las heridas, cambiando el vendaje y colocando la faja de postoperatoria que mantiene comprimida toda la zona, facilitando la recuperación. Antes del alta, los especialistas le darán todas las recomendaciones necesarias para la recuperación y el cuidado.

Los drenajes son parte del proceso

Los drenajes se ocupan de recoger  la producción de líquido seroso o sangre para evitar que se forme un seroma (un bulto por acumulación de líquido). Deben permanecer tanto tiempo como sea necesario hasta que el cuerpo deje de producir más líquido del que puede reabsorber. Si esto no se produce antes de recibir el alta, el paciente deberá mantener los drenajes en casa y emplearlos siguiendo las instrucciones de los médicos.

Sí, vas a tener que llevar faja de compresión durante un tiempo

La faja está diseñada específicamente para disminuir el dolor y la tensión sobre los músculos abdominales, evitando que realicen esfuerzos innecesarios que afecten a la zona tratada. Además, la comprensión es necesaria para que los tejidos desplazados se adapten a su nueva posición. Dada su importancia, la faja se debe llevar día y noche durante, al menos, un mes y medio. Transcurrido este plazo, se irá retirando progresivamente en función de la respuesta al dolor.

Las primeras semanas de postoperatorio: calma y reposo

Las semanas siguientes a la operación, especialmente la primera, requieren reposo para facilitar la curación de las heridas. Durante este tiempo es muy importante permanecer en cama con el torso elevado para relajar la piel del abdomen y evitar la tensión sobre la herida. Asimismo, se deben reducir al mínimo los desplazamientos, llevándolos a cabo tan solo para actividades esenciales como ir al baño. Otras recomendaciones importantes son:

• Seguir la pauta de medicación dictada por los especialistas (principalmente, analgésicos para el dolor).
• Controlar la dieta, evitando comidas copiosas y pesadas. Es crucial beber muchos líquidos para favorecer el drenaje.
• Una vez retirados los drenajes, se deberá lavar y curar a diario la herida siguiendo las instrucciones de los médicos.

Poco a poco, se deberá ir incorporando más actividad, como pequeños paseos por la casa, para evitar que se formen edemas y ayudar a reducir la inflamación. Eso sí, evitando realizar grandes esfuerzos que puedan resultar contraproducentes. Es recomendable también no usar prendas ajustadas hasta que toda la zona esté recuperada.

Un consejo: los masajes linfáticos postoperatorios ayudan en la recuperación

El drenaje linfático es un tipo de masaje especial que se aplica en distintas zonas para favorecer la circulación de la linfa y ayudar a eliminar edemas y exceso de líquido. Una vez que se hayan retirado los drenajes y la herida haya cicatrizado, si sigue existiendo inflamación en la zona del abdomen, los masajes linfáticos pueden ser de ayuda para reducirla. Eso sí, siempre se habrá de consultar primero con el médico y recurrir a manos expertas, ya que una mala praxis puede resultar extremadamente contraproducente.

¿Qué sucede con la herida de la abdominoplastia? ¿Es dolorosa?

Es poco habitual notar dolor en la herida, ya que se produce una pérdida de sensibilidad en la zona, especialmente durante las primeras semanas. La sensibilidad se irá recuperando poco a poco, pudiendo tardar hasta varios meses. Sí es más habitual experimentar dolor en la pared abdominal, fruto de la tensión y la inflamación. En todo caso, nada que no se pueda sobrellevar fácilmente con los analgésicos.

En lo que respecta a la cicatriz, ubicada en la zona baja del abdomen, su tamaño dependerá de las necesidades de cada paciente. Sea como sea, los puntos son internos y la herida estará completamente cerrada en 10-15 días. Durante este tiempo, y hasta unas semanas después, es muy importante realizar las curas indicadas por el médico para evitar cualquier riesgo de infección y favorecer la cicatrización.

¿Qué ocurre después del primer mes tras la intervención? ¿Puedo hacer vida normal?

Lo habitual es que en torno al mes o mes y medio la recuperación se haya completado. La inflamación habrá desaparecido del todo (o prácticamente del todo), las heridas habrán cicatrizado y el paciente podrá hacer vida normal. También se procederá a la retirada progresiva de la faja de compresión, evaluando la respuesta del paciente al dolor y la presión. Es muy probable que se mantenga cierta hipersensibilidad en la zona durante un tiempo, cuya duración variará en función de la persona. Las cicatrices, aunque ya estarán curadas, aún serán muy visibles en esta fase. Con el tiempo irán volviéndose más y más imperceptibles hasta que, alrededor del año tras la intervención, ya sean completamente disimulables.

Tras el proceso postoperatorio de la abdominoplastia, ¿qué resultados puedo esperar?

Una vez que se ha completado la recuperación, el resultado final esperable es un vientre mucho más plano y firme en el que la flacidez y la piel colgante han desaparecido. Además, con el tiempo, las cicatrices se van disimulando hasta volverse casi imperceptibles. ¿Qué no debemos esperar de la abdominoplastia? Sobre todo hay que tener en cuenta que no se trata de una intervención para adelgazar. Puede ser el paso definitivo para conseguir un vientre plano tras un proceso de pérdida de peso, o para eliminar la flacidez tras un adelgazamiento intenso, pero nunca debe recurrirse a ella para combatir el exceso de peso.

¿Merece la pena realizarse una abdominoplastia?

Tal y como adelantábamos al principio, los beneficios de la abdominoplastia no son únicamente estéticos, pues al reforzar la pared abdominal se logra equilibrar todo el torso, reducir el riesgo de determinadas enfermedades y mejorar la función sexual. Estamos hablando, pues, de beneficios notables para la salud, el aspecto físico y la autoestima; lo que convierte a la abdominoplastia en una de las intervenciones plásticas más demandadas, tanto en hombres como mujeres. La decisión final sobre si merece o no la pena es una cuestión personal y subjetiva, pero el historial de resultados y satisfacción con esta intervención son un notable aval a tener en cuenta.

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